En la Sierra del Rentonar, a 965 metros de altura encontramos este sanatorio.
Fué construido en el año 1926 por la comunidad religiosa Compade Jesús durante la II república.
Han sido varios los usos que se le ha ido con el paso del tiempo a este lugar, comenzó siendo una casa de reposo, una colonia infantil de vacaciones y en la Guerra Civil se usó como hospital militar.
Cuando terminó la contienda el antiguo hospital militar, pasó a ser el sanatorio para tuberculosos de Torremanzanas hasta 1963, fecha en la que se abandonaron estas instalaciones.
El edificio se divide en dos plantas con una superficie total de 97.694 metros cuadrados entre el edificio principal y las instalaciones anexas.
El paso del tiempo, los actos vandálicos y las condiciones climatológicas a las que se ha enfrentado este edificio han hecho que el estado actual sea de ruina; el edificio carece de tejado,paredes y techo en la mayoría de las habitaciones.
El acceso a la segunda planta es imposible, ya que como puede observarse en la imagen las escaleras han desaparecido.
Me gustaría compartir con vosotros lo que me ha transmitido este sitio, de las dos visitas que he hecho.
Bienvenidos al Sanatorio de Torremaçanes.
Tras medio dia de búsqueda de nuevos lugares y visita a otros ya conocidos, decidimos pasar a visitar este sitio; por costumbre me gusta realizar barridos fotográficos de los exteriores de los lugares que conozco y este no iba a ser menos, por lo que cámara en mano me puse manos a la obra.
Lo primero que encontramos nada mas entrar fué una gran pila de piedra que usaban como lavamanos.
A mano derecha encontramos los aseos, y aquí comienza mi historia con este lugar; iba acompañada con el mejor compañero de exploración, mi padre; mientras el se ataba la cordonera justo debajo de la ventana ( siguiente foto) yo estaba en la puerta del aseo, cuando mientras tomaba una instantanea noté como algo espeso pasaba por detrás de mí ( no, no hacia viento, ni dada por el estilo) y en el mismo momento, la ventana que se observa en la siguiente imagen, se cerró de golpe.
No le dí importancia hasta que llegamos a casa y pasamos las fotos al ordenador, pero el nerviosismo empezaba a hacer mella en mí.
Seguimos con nuestro recorrido y llegamos a una pequeña estancia donde observamos un calentador bastante oxidado |
La siguiente parada la hacemos en la terraza, donde antiguamente reposaban los enfermos |
Volvemos sobre nuestros pasos para tomar las últimas fotos |
Me gustaría dar las gracias a mis compañeros de aventura y sobre todo a Eddie por hacer lo imposible para sacarme una sonrisa en este lugar.
Hasta la próxima!!!
Hasta la próxima!!!
5 Comments
Buenas fotos Andrea, y buen lugar pese a quedar solo los muros! Al menos nos hechamos unas buenas risas allí dentro y completó un dia que hasta el sitio de antes( eso sí ese tela ) no habia sido muy productivo.
ResponderEliminarPor cierto, ¿Cual es la foto de la cara?? ¿la has colgado?? quiero verlaaaaa! XDD
Besets
que va, esas son las que destruí indiscriminadamente jejeje las que he colgado son las que hicimos el dia X jejej.
ResponderEliminarSaludets.
Impresionante el lugar Medussa.
ResponderEliminarY que decir de tu experiencia, los pelos de punta... yo con lo sensible que soy no se como actuaría la verdad.
Fenomenal el reportaje como siempre, un saludo.
Muy bonitas fotos, lastima que no tengas las fotos de la cara, seria interesante verlas.
ResponderEliminarIntrepida exploradora urbana! Desde luego el sitio se las trae. Realmente hay demasiadas manchas extrañas. XD
ResponderEliminar