La batalla de Belchite ( I )


El árbol se levanta sobre la tapia hundida.
El viejo campanario –la paloma que había
huyó bajo la guerra- está desierto:
Todo es la sombra.



El monte desolado invade el patio,
el pozo seco,
el niño destrozado por la yedra.
Alguien recuerda –Antes estuve aquí,
hoy ya no vuelvo- por los muros de adoba calcinados:

¿Quién ha puesto el olivo
enfrente del olivo?

¿Quién ha dejado sangre
enfrente de la sangre?

¿Quién ha traído muerte
en contra de la muerte?

¿Quién, en fin, ha destruido al hombre
contra el hombre?

Sobre la casa yerta ya nadie se levanta.

José Antonio Labordeta.


Belchite, 18 de Junio de 1809 - Guerra de sucesión.
Belchite, 4 de Marzo de 1838 - Guerra Carlista
Belchite, 1937 - Guerra Civil.

El frente de Aragón había estado tranquilo desde el otoño de 1936, controlado por los anarquistas y el POUM. 
Se habían formado colectividades agrícolas en esa región bajo la orientación del Consejo de Aragón, dominado por los anarquistas y cuya autoridad había sido reconocida por el gobierno de Largo Caballero. Desde el punto de vista del gobierno, esa región no era de fiar políticamente y no entregaba al ejército republicano lo que le correspondía en productos y soldados.

En Junio de 1937, con el fin de distraer las operaciones el estado mayor republicano preparó una serie de ofensivas con el fin de aliviar la presión de esta zona de la contiende e intentar evitar la caída de Bilbao en las manos del ejercito franquista. 
Para ello, se dispusieron una serie sucesiva de avances, primero en Huesca, seguidamente, en Agosto en Belchite y posteriormente en Diciembre en Teruel.

En el caso de Belchite, considerando el éxito obtenido en Brunete, el general Rojo dispuso un contragolpe estratégico. Para ello dispuso un importante número de efectivos a lo largo del extenso frente de Aragón intentando contar con el factor sorpresa que ya en otras ocasiones había resultado con éxito.
El 24 de Agosto se inició la ofensiva de Belchite, con el objetivo de realizar un avance rápido sobre Zaragoza para tratar de ocuparla y provocar así el desplazamiento de tropas franquistas desde el Norte.


Un total de algo más de 80000 hombres divididos en 4 agrupaciones principales tenían como objetivo principal rodear y ocupar velozmente Zaragoza desde varios frentes: por el Norte desde Zuera, más al Sur desde Farlete hacia Villamayor, por el Este desde Quinto y Pina; y por último, con la mayor cantidad de fuerzas, otro amplio sector que cubría Quinto, Belchite, Mediana y Fuentes. 


El objetivo prioritario inicial era avanzar ordenada y rápidamente para conquistar los puntos claves y posibilitar la entrada en Zaragoza. Sin embargo, esta ambiciosa operación no tuvo los resultados esperados. 
El factor sorpresa, clave en la operación, llevada a cabo incluso principalmente de noche, se perdió debido a la falta de coordinación entre todos los frentes, la inexperiencia de las tropas, los fallos de intendencia, y, sobre todo, en el detenimiento de las acciones militares en puntos no prioritarios de la ofensiva, como pudo ser Belchite. 


Durante días, mediante duros combates, el cerco sobre la villa se fue completando, quedando pequeños reductos de resistencia, como el seminario, que finalmente terminarían igualmente cayendo (2 de Septiembre). 



La aviación jugó un importante papel tanto en acciones de ataque como de aprovisionamiento para los sitiados. 

(Bombardero SB-2 "Katiuska, sobrevolando a un grupo de soldados en las inmediaciones de Belchite)

Una vez alcanzado el casco urbano, los combates se realizaron casa a casa, cuerpo a cuerpo, hasta restringir un ultimo núcleo de resistencia en torno al ayuntamiento y viviendas adyacentes, así como la torre de la iglesia de San Martín.

(Ayuntamiento)

Estos últimos reductos, a pesar de los últimos intentos de resistencia y huida de sus defensores, fueron tomados finalmente el día 6 de Septiembre.

La batalla de Zaragoza se convirtió en la batalla de Belchite, cambiando una ofensiva de gran alcance en una acción bélica sobre una serie de plazas secundarias, entre las que destacaba Belchite, que hicieron perder tiempo y gran cantidad de medios al Ejercito Popular. Como resultado no solo no se consiguió la toma de Zaragoza, sino que además no se evitó la caída del frente Norte y la toma de ciudades como Bilbao por el ejercito franquista.

La batalla de Belchite tuvo su segundo episodio en 1938, dentro de la primera fase de la Batalla de Aragón, con la gran ofensiva final del ejército franquista que supuso el inicio del fin definitivo de la Guerra Civil. Después de la batalla de Teruel, el ejército franquista pasó a la ofensiva para conquistar el débil frente de Aragón, enlazar con el Mediterráneo y así dejar aislado el reducto republicano de Cataluña. El avance del potente y bien equipado cuerpo de ejército sublevado, reforzado por los cuerpos marroquies y el CTV italiano, fue fulgurante, conquistando en un corto espacio de tiempo una enorme extensión de terreno.

Debido a la feroz defensa planteada en la primera batalla, la propaganda ideológica del bando sublevado adoptó Belchite como un símbolo por lo que su toma alcanzó un significado especial. La desproporción de las fuerzas fue tal, que en el transcurso de los días 9 a 11 de Marzo, las fuerzas republicanas fueron arrolladas, tomandose junto a Belchite, las poblaciones de Azuara, Almonacid y La Puebla de Albortón.


PRÓXIMAMENTE, 2ª PARTE. EL PUEBLO VIEJO DE BELCHITE.




Textos y fotos sacadas de:
http://perso.wanadoo.es/batto10/batallas/belchite.htm
http://www.belchite.es/index.php/belchite/belchite-antiguo
http://www.gregoriofernandezcastanon.com/corazon_viejo_belchite.html
http://www.unperegrinoporelmundo.com/2011/10/belchite-zaragoza.html

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